Convención de Basilea
Desempeña un papel crucial en la gestión global de desechos peligrosos, fomentando prácticas seguras de manejo y eliminación.
La Convención de Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos de desechos peligrosos y su eliminación es el tratado multilateral de medio ambiente que se ocupa más exhaustivamente de los residuos peligrosos.
Se trata de un acuerdo respaldado por 170 países que vela por la seguridad de los países receptores de los residuos garantizando que estos estén exentos de peligrosidad y que por lo tanto contribuye al impulso de la economía circular a nivel mundial.
Beneficios
La enmienda para plásticos tiene como objetivo reducir la exportación e importación de aquellos residuos de materiales plásticos que puedan suponer un problema para la salud de las personas o para el medio ambiente al ser trasportados de un país a otro para darles un uso determinado (reciclado mecánico, incineración, etc.).
Nuestra solución
Estos residuos plásticos, para ser transferidos a través de las fronteras de dos países, deben cumplir una serie de requisitos descritos en la convención de Basilea para poder ser transportados y que los países receptores puedan aceptar su entrada. Los laboratorios de AIMPLAS han obtenido la acreditación ENAC para el conjunto de ensayos necesarios para permitir la exportación de residuos plásticos:
- Potencial de inflamabilidad
- Corrosividad y reactividad
- Identificación
- Toxicidad y radioactividad
Preguntas frecuentes
El objetivo del convenio es proteger la salud de personas y medio ambiente de efectos perjudiciales de los desechos peligrosos.
Este convenio prohíbe la exportación de desechos peligrosos.