Resistencia en lavavajillas
Las nuevas tendencias de consumo han creado la necesidad de fabricar envases que puedan ser reutilizados
El objetivo del ensayo es evaluar la resistencia física que tiene un material plástico al lavado en un lavavajillas doméstico, simulando el uso que el consumidor podría darle en su casa a un artículo destinado para ser reutilizable.
En qué consiste el ensayo de resistencia
En nuestros laboratorios realizamos el ensayo según la norma UNE 53928. En este ensayo, acreditado por ENAC, sometemos las muestras plásticas a varios ciclos de lavado de forma sucesiva en las condiciones que la norma determina sobre la dureza del agua, tiempo y temperatura de lavado, tipo y cantidad de detergente, tipo y cantidad de abrillantador y tiempo de secado.
El número mínimo de lavados para cumplir con esta norma es de 5 ciclos quedando el número máximo de lavados a decisión del fabricante. Para determinar el número máximo de lavados se puede ensayar directamente lo que el fabricante considere y ver si cumple o no, o ir haciendo evaluaciones de la muestra cada “X” ciclos para ver cuando el producto deja de cumplir con los requisitos de la norma y así determinar de forma más exacta el máximo número de ciclos de lavado que soporta el producto.
Para verificar la integridad del material, tras los lavados realizados, se hace una inspección visual por parte de 2 inspectores cualificados comparando las muestras ensayadas con otras muestras patrón o de referencia, es decir, muestras originales que no han sido lavadas. Cada inspector registra de forma independiente los cambios visibles que ha ido observando.
Dicha verificación visual consiste en buscar posibles cambios en cualquiera de las siguientes propiedades:
- Color
- Brillo
- Veteado
- Presencia de depósitos y formación de capas iridiscentes.
- Agrietamiento, hinchazón, deformación, delaminación o cualquier otro defecto que pueda aparecer.
El marcado con el número máximo de ciclos de lavado que se ha demostrado que el material resiste, puede incluirse en la propia pieza, o en su etiquetado o embalaje, utilizando el pictograma que aparece en la norma.
Preguntas frecuentes
Lo que este ensayo demuestra es que el material resiste físicamente un número exacto de ciclos de lavado y que, por tanto, podrá ser reutilizado por el consumidor sin que se modifique su estado o características originales. Para demostrar que un material plástico reutilizable es seguro para el consumidor habría que realizar ensayos de migración según el Reglamento (UE) Nº 10/2011.
Es obligatorio que se realice ensayos de migración antes de la prueba de resistencia al lavavajillas, pero tras los ciclos de lavado es realmente recomendable ya que por el momento la legislación no indica que sea obligatorio.